El día lunes 8 de junio, Gladys Mponda se dirigió a la sesión plenaria en nombre de StreetNet.
Pat Horn, Coordinadora de StreetNet Internacional, comentó que a pesar del decepcionante fracaso en obtener un reconocimiento claro del derecho de los trabajadores informales a participar en las negociaciones colectivas, no restringidas por las malas prácticas nacionales, consiguieron ganar otros nuevos puntos que no han estado en los instrumentos de la OIT hasta ahora. “Por ejemplo: un marco político integrado debe abordar la promoción de las estrategias de desarrollo local, tanto rurales como urbanas, incluido el acceso regulado para el uso de los espacios públicos y el acceso a los recursos naturales públicos para los medios de subsistencia – pero luego, después de muchas discusiones, y perdiendo el tema en otras partes del texto, finalmente conseguimos una cláusula en el preámbulo que indica que los medios de subsistencia actuales de los trabajadores de la economía informal, deben ser conservados durante el proceso de la transición a la formalización. A finales de la semana debería estar lista la versión más reciente de lo que se ha acordado para su presentación a la sesión plenaria el día viernes, cuando la Conferencia votará sobre la adopción de la Recomendación”
La Sra. Mponda dijo que la OIT enfrenta grandes desafíos si desea seguir siendo relevante en este futuro escenario de trabajo.
1. Ser más eficaz a nivel de gobierno local
Al igual que todos los órganos de las Naciones Unidas, la OIT trabaja en dos niveles – nacional e internacional. Actualmente los instrumentos de la OIT no abordan el papel y las responsabilidades de los gobiernos locales, con excepción de las declaraciones generales sobre la importancia de los diferentes niveles de gobierno que coordinan su trabajo.
2. Adaptar las estructuras tripartitas para ser más inclusivas de nuevos tipos de trabajadores
En los años transcurridos desde que StreetNet fue acreditada para asistir a la primera Conferencia Internacional del Trabajo en 2004, hemos hecho muchos esfuerzos para obtener el reconocimiento de los derechos de los trabajadores por cuenta propia a estar representados directamente por sus propios negociadores, elegidos democráticamente, en las negociaciones colectivas con los homólogos apropiados, quienes tienen poder sobre sus condiciones de trabajo – y estos no son los empleadores, sino autoridades tales como las autoridades del gobierno local. Sin embargo, nuestra experiencia es que los representantes titulares de la tradicional fuerza laboral empleada, aún no están listos a captar el desafío de establecer nuevos tipos de foros de negociación, los cuales son más representativos de los trabajadores de la economía informal y nuevas formas de trabajo, especialmente los trabajadores por cuenta propia.
Nuestro segundo reto a la OIT para el próximo centenario, es encontrar maneras de adaptar estructuras tripartitas con el fin de aumentar el nivel de representación de los trabajadores en estas nuevas formas de trabajo.
